Pixel House
La vivienda se ha concebido como un sistema de filtros de privacidad y temperaturas. A través de estos filtros, se pixelan los espacios para generar nuevos usos en función de los habitantes y los condicionantes exteriores.
El filtro principal es el jardín, con especies autóctonas que sirven de primera barrera para el aire cálido y la retención del polvo arenoso que suele viajar por el cielo de Kuwait. A este primer filtro le sigue la piscina, que se cubre con una losa perforada que, con el tiempo, se cubrirá de plantas trepadoras y hará del espacio de la planta baja un lugar perfecto para descansar durante las noches de otoño, invierno y primavera.
El espacio cerrado y climatizado, donde se encuentran los salones adjuntos al área ajardinada, tiene huecos que abren hacia el espacio exterior sombreado, propiciando una minimización de la ganancia térmica provocada por la radiación solar. Estos espacios, que son fundamentales durante el día de los habitantes de la vivienda, fluyen en vertical para unirse a través de un espacio conformado por un mueble personalizado de usos múltiples, que forma el corazón de la casa y envuelve la escalera principal que conduce a la zona más privada.
Como es propio de la cultura tradicional en Kuwait, el área de reunión para amigos y visitantes (diwaniya) se encuentra en la parte más pública de la vivienda, cerca de la entrada, y se divide en zonas de exterior, donde hacer vida nocturna, y zonas de interior, donde reunirse cualquier día a cualquier hora. Este es el pixel más privado.
Los patios actúan como filtros térmicos hacia el interior de la vivienda. En función de cómo se abran y cierren los espacios que los envuelven funcionan como un convector que coge el aire caliente y lo expulsa de la vivienda.